2019, Segundo Semestre, vol. 54, n° 2, ISSNe 2314-1549 / ISSN 0556-5960 Esta obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional |
RESEÑAS
Barcos, M. F. y Troisi Melean, J., (Comps.). Elites rioplatenses del siglo XIX: Biografías, representaciones, disidencias y fracasos. La Plata: Universidad Nacional de La Plata. Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación. 2018. Recuperado de https://www.libros.fahce.unlp.edu.ar/index.php/libros/catalog/book/111. ISBN-13: 978-950-34-1683-9
Dahyana Nahir López
Centro de Investigaciones Históricas. Universidad Nacional de Río Cuarto. Córdoba, Argentina. licdahyanal@gmail.com
El libro titulado Elites rioplatenses del siglo XIX. Biografías, representaciones, disidencias y fracasoscorresponde a una producción reciente de la Universidad Nacional de La Plata, clasificada dentro de la colección de Estudios e investigaciones de la edición de Memoria Académica que dispone la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación.Para la elaboración de esta publicación fueron convocados historiadorescon diferentes recorridos que convergen en el estudio de las elites a través de las segundas líneas. Los autores fueron Santiago Harisp, Sabrina Castronuovo, Facundo Roca, David Velázquez Seiferheld, Guillermo Banzato, María Elena Infesta y Marta Valencia; y a cargo de la compilación estuvieron María Fernanda Barcos y Jorge Troisi Melean. Esta obra contó con una evaluación interna y externa organizada por la Secretaría de Investigación de la misma facultad.
El recorte temporal de la publicación obedece al proceso de consolidación a lo largo del siglo XIX de cuatro naciones: Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay. Por lo que, describelos rasgos de un período a través de algunas figuras visibles, pero poco reconocidas. Los diferentes autores acudieron a la indagación biográfica para examinar como esas figuras de segundo orden participaron en la vida política y cultural de sus regiones. Observando a estos individuos como intermediarios que portaban prestigio, redes, ideas y capacidad de gobernar, incluso saberes que les dieron legitimidad y contribuyeron a su ascenso y consolidación dentro de la elite dirigente. Analizar a estas figuras como agentes históricos otorga sentido a los discursos sociales en el medio donde accionan. Esta modalidad se convierte en nueva perspectiva que permite explorar lo privado y analizar la información que este concede sobre público einversamente. Para ello, el libro cuenta con una estructura de cinco capítulos.En el primer apartado denominado Francisco Berra entre dos orillas, Santiago Harispe indaga sobre aspectos biográficos políticos e intelectuales del director general de Escuelas de la provincia de Buenos Aires a fines del siglo XIX. Este autor investiga en la biblioteca y correspondencia personal del argentinoFrancisco Berra.
El trabajo de Berra se encuadraba dentro del ámbito pedagógico e historiográfico. Sin embargo, su posición contraria a la imagen de Artigas en Uruguay, tuvo dos consecuencias en su vida. Por un lado, lo obligó a volver a Argentina; y por otra parte, originó en 1883 la prohibición de su Bosquejo Histórico de la República Oriental del Uruguay en los establecimientos escolares. Pese a estos acontecimientos, no se aleja de los ámbitos intelectuales y políticos, lo que motiva a Harispea sostener que Berra sacrificó su trabajo como intelectual a cambio de conservar sus lazos de sociabilidad. Al mismo tiempo, observa que Berra no sobresalió en la historia nacional de ninguno de los dos países donde actuó. La reconstrucción del itinerario de vida intelectual de Berra en Uruguay y Argentina posibilita entender la modalidad que utilizaban estos sujetos para establecer las relaciones de socialización y producción teórica en aquellos años.
En el segundo capítulo Los unos y los otros: Las voces críticas de Euclides Da Cunha y Lucio V. Mansilla sobre “civilizados” y “bárbaros”, Sabrina Castronuovo estudia dos actores que tuvieron una importante influencia en Brasil como en la Argentina. Por un lado, aborda la vida de Euclides Da Cunha, un poeta y militar republicano que en 1897 formaba parte de una campaña militar hacia el poblado de Canudos como corresponsal de guerra y fotógrafo para el diario O Estado de Sao Paulo. La misión de esta expedición había consistido en suprimir la conspiración monárquica contra el gobierno de la República. El accionar salvaje del ejército civilizado en campaña, le provocó una gran desilusión. Entonces, escribió los bocetos de Los Sertones. En el Río de la Plata, Lucio Mansilla fue un político y militar perteneciente a la élite criolla que programó y llevó a cabo en 1870 una expedición hacia las tolderías de los ranqueles. Se aventuró a partir del sabor amargo que le había dejado la desilusión con el gobierno de turno y buscando su reconocimiento. Por su parte, Da Cunha encontró esa desilusión hacia los hombres ilustrados a partir de la cruenta guerra.
La historiadora enfatiza la importancia de estos textos como fuentes pioneras de información sobre las costumbres y organización de los pueblos nativos. Al mismo tiempo que posibilitaron estudiar a los hombres de elite, sus intereses, ideas y tensiones en el mundo al que pertenecían dos intelectuales. Castronuovo expresa que no buscaban visibilizar a los indios desde una admiración de sus valores y costumbres, sino que el acento estaba puesto en sus desencantos hacia la civilización y el gobierno. Además, observa que los estudios académicos enfocados en las relaciones de frontera entre ambas sociedades han demostrado la cotidianeidad de las relaciones entre uno y otro lado. Este panorama de fronteras permeables persistía pese a que las élites gobernantes negaran tanto la existencia de tal influencia cultural como la presencia de los poblados indígenas en los proyectos nacionales.
En el capítulo titulado Representaciones y usos políticos de la muerte: discursos y prácticas fúnebres en la provincia de Buenos Aires (1822-1880), Facundo Roca aborda las transformaciones de las practicas funerarias durante la época colonial y las posteriores al siglo XIX. Ello dota de novedoso su enfoque, debido a que utiliza la biografía para analizar la muerte de los sujetos y no la vida de los mismos.
Entrado el siglo XIX, la muerte se independiza del anonimato que le imponía hasta entonces la sepultura eclesiástica. Esta transformación se observa, según este autor, a partir de la creación en 1822 del Cementerio del Norte en la ciudad de Buenos Aires y se prolongan hasta la década de 1880. La nueva individuación de los muertos simboliza el retorno a la vida social bajo la figura de difuntos notables. También, el desarrollo de la utilidad pública de la muerte bajo un carácter pedagógico y evocativo a los difuntos ilustres complementado con monumentos fúnebres y honras públicas. Así, un fallecimiento se desdobló en una muerte privada y una muerte pública. Fue esa muerte cívica la que se convirtió en objeto de honores pero también de feroces disputas y actos de violencia.
En el trabajo de Facundo Roca se encuentran como ejemplo las muertes públicas de algunos personajes políticos centrales del siglo XIX como Dorrego, Saavedra, Quiroga, Lavalle, Rivadavia y Rosas. El autor observa que con, la excepción de Rivadavia y Rosas que mueren en el exilio, los otros fallecen de forma violenta.
En el capítulo 4, Velázquez Seiferheld aborda la biografía de Fidel Maíz, a la vez, que analiza las desavenencias entre el Estado y la iglesia en Paraguay. Maíz fue rector del Seminario Conciliar, opositor a Francisco Solano y tras la victoria paraguaya de Curupayty, apoyó a López y desempeñó el papel de fiscal de sangre. En Arroyos y Esteros, se dedicó a la educación y fundó una escuela de primeras letras. En sus Memorias, Maíz elaboró el concepto de lopizmo como síntesis de todo aquel pasado paraguayo.
En lo que respecta a la trayectoria intelectual, Velázquez Seiferheld la califica como sinuosa y oportunista. Sus Memorias tituladas Etapas de Mi Vida, publicadas en 1919, fueron la respuesta a unos artículos escritos por Juan Silvano Godoi. Para el autor, el trasfondo de esas publicaciones iba más allá de contestar a su detractor sino que fueron una batalla por la memoria del Paraguay de preguerra.
La historia contemporánea recuerda a este actor solamente por su papel en el marco de la Guerra de la Triple Alianza. Sin embargo, como muestra Velázquez Seiferheld a lo largo de su investigación, la trayectoria anterior y posterior al conflicto proporciona elementos clave para la comprensión de aspectos sustanciales como las relaciones Iglesia-Estado, la educación y las batallas por la memoria en el Paraguay.
En el último trabajo, comparten autoría Guillermo Banzato, María Elena Infesta y Marta Valencia. Este equipo de investigadores, en Expansión de la frontera, tierrapública y formación de las elites terratenientes en la provincia de Buenos Aires, 1780-1880, busca llevar al lector a pensar quiénes fueron integrando la elite de propietarios de las tierras de frontera y, también, sobre los cambios en la composición de este grupo a través del período abordado. Esta investigación integra un análisis sobre las diferentes estrategias de los sectores medios y altos que fueron conformando la élite propietaria rural. El tratamiento exhaustivo de las fuentes y el entrecruzamiento de la información, permitió a estos investigadores reconocer cuatro grandes grupos de propietarios de tierras: los pertenecientes a familias fundadoras de estancias, los militares, los grandes comerciantes y los negociantes al menudeo que accedieron a la tierra a partir de su actividad en la política y en las finanzas. Haber sido parte del elenco de grandes terratenientes, según reflexionan los autores, no implicaba necesariamente ocupar posiciones altas dentro de la política. En muchos casos, la reducción de los costos de transacción en las operatorias con tierras públicas dependió de tener una red de relaciones e información complementaria.
En primer lugar, estos autores realizan un análisis sobre las posiciones historiográficas de Oddone, Sábato, Halperin, Mayo, Fradkin, Garavaglia, Hora, Gelman y Santilli con respecto a la conformación de las elites y sus vínculos con el Estado. El trabajo continúa con una estructura por periodos según los avances sobre la frontera con el indio. En un primer apartado se dedican a la frontera en el río Salado desde el 1780-1822, donde detallan el accionar del abuelo de Rosas, Clemente López Osornio, como, asimismo, del propio Juan Manuel. También incluyen a Pedro Pablo José de Ezeyza, Francisco Ramos Mejía y Marcos Miguens. En un segundo avance de la frontera, desde el río Salado hasta la línea Junín-Azul-Tandil-Bahía Blanca, durante 1822-1843, distinguen tres grupos: familias de militares, nuevos propietarios y los políticos. Dentro del primer sector destacan al general Marcos González Balcarce; en el segundo, figuran Juan Nepomuceno Fernández, Eustaquio Antonio Díaz Vélez, Juan Bautista Peña, Remigio González Moreno, Pedro Trápani, Manuel Morillo y los hermanos Anchorena. Entre los políticos, Felipe Benicio de la Paz Arana y Andonaegui. El siguiente periodo corresponde a la tercera frontera: entre el centro de la provincia y la zanja de Alsina, entre 1857 y 1878. Los autores reconocen un grupo formado por familias con arraigo en el comercio y la política con intereses hacia la propiedad rural. Esta periodización junto a un amplio repertorio de fuentes, les permitió a los investigadores concluir con la distinción de cuatro grandes grupos: los pertenecientes a familias fundadoras de estancias; los militares; los grandes comerciantes y los negociantes al menudeo; y finalmente, los que accedieron a la tierra a partir de su actividad en la política y las finanzas. Ello muestra que la entrada al negocio de la tierra tuvo como base material y social distintos caminos.
En suma, esta obra permitió develar rasgos de la vida política, social, intelectual y cultural de Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay a través de la indagación biográfica de algunas figuras de segundo nivel dentro de la elite dirigente durante el siglo XIX. El estudio de estos agentes históricos ha formado parte de una nueva perspectiva que posibilitó explorar la interdependencia entre lo privado y público, sobre el prestigio, las relaciones de socialización, la producción teórica y los negocios rurales en aquellos años.