Saberes y Prácticas. Revista de Filosofía y Educación

Saberes y prácticas. Revista de Filosofía y Educación / ISSN 2525-2089
Vol. 10 N° 1 (2025) / Sección Dossier / pp. 1-4 / Licencia Creative Commons
Centro de Investigaciones Interdisciplinarias de Filosofía en la Escuela (CIIFE),
Facultad de Filosofía y Letras, Universidad Nacional de Cuyo, Argentina.
revistasaberesypracticas@ffyl.uncu.edu.ar / saberesypracticas.uncu.edu.ar


Introducción Dossier

Infancia y Filosofía


La infancia demanda acogimiento y cuidado. Los recién llegados demandan su inscripción en este mundo y en la historia. El camino de la educación es la respuesta que nuestra cultura diseñó para hacerse cargo de esa demanda. Introducir a la infancia en la gramática y la sintaxis del lenguaje y de la vida en común es nuestro inevitable modo de acogerla. Aquellos que no saben hablar deberán hacerlo con nuestras palabras. Con esas palabras viejas, usadas, gastadas deberán aprender a decir “yo” y tendrán que atreverse a crear nuevas palabras, nuevas formas de combinarlas, nuevos sentidos para las palabras usadas.

Es precisamente con esa tensión entre la infancia y el lenguaje o, mejor dicho, con ese quiebre que la infancia introduce en el lenguaje, con esa discontinuidad, con la que debe lidiar toda educación. Como nos enseñó Agamben (2007), esa discontinuidad es la condición sobre la que se asienta la experiencia y la historia. Por tanto, acoger a esos recién llegados implica asumir que el lenguaje no cae a posteriori sobre la infancia o que la infancia antecede cronológicamente al lenguaje y desaparece una vez que se aprendió a hablar. La infancia no es un paraíso que abandonamos definitivamente "(...) sino que coexiste originariamente con el lenguaje, e incluso se constituye ella misma mediante su expropiación efectuada por el lenguaje al producir cada vez al hombre como sujeto” (p. 66).

La infancia se presenta en ese espacio en que el límite del lenguaje se hace presente, en ese espacio poblado de palabras que, al mismo tiempo, señalan su frontera al tener que comenzar a decir todo de nuevo. Alguien nace y, en ese mismo instante “(…) está cayendo en el lenguaje y en el habla”, nos dice Agamben (p.74). Alguien nace e ineludiblemente se produce una cisura en el lenguaje y en la historia, una interrupción que impide la continuidad, que obliga a la humanidad a detenerse para comenzar a hablar otra vez como si fuera la primera.

Por estos motivos cabe preguntar: ¿Cómo pensar la educación a partir de la tensión entre lo nuevo y lo viejo? ¿Qué espacios y qué tiempos se abren en la historia para inventar nuevas palabras? ¿Qué formas de acogimiento ensayan nuestras culturas para dar abrigo a sus infancias? ¿Cómo nos interpelan las infancias? ¿Qué formas de escucha, acogimiento y cuidado se ponen en juego frente a la novedad de la infancia? ¿Cómo la filosofía nos ayuda a pensar la tensión entre la infancia y el lenguaje? ¿Cómo las infancias interrogan a la filosofía?

Las infancias y su comprensión en el tiempo simbolizan un área de indagación compleja para los campos de la epistemología, la sociedad y la cultura. Tres textos abordan esta cuestión a partir de casos o lecturas concretas que posibilitan abrir las formas de interpretar la infancia, de acogerla, entenderla y escucharla como un acto de resistencia frente a lógicas y prácticas adultocéntricas, eurocéntricas o racializadas.

En primer lugar, Beatriz Fabiana Olarieta, Conceição Firmina Seixas Silva y Rita Marisa Ribes Pereira en su texto “M, una niña entre la tierra y el cielo: leyendo Kramp de María José Ferrada” piensan, junto con la primera novela de la autora chilena, una poética de la infancia, una poiesis. Al inaugurar la infancia, en su infancia, se abre un mundo, sostienen las autoras. Este ensayo relata y analiza la vida de una niña: “M”, quien junto a su padre viajante vende productos de ferretería por los pueblos. En esta travesía de cercanía con la vida adulta “M” devela una singular epistemología que le permite sistematizar el mundo que se le presenta. Esta historia se contextualiza en plena dictadura chilena. Un giro de la historia, de su devenir niña, es cuando se introduce la visión de los “fantasmas” de la dictadura, una niña ya crecida debe asumir ese contexto y reentrar en una nueva infancia que le permita reinventarse.

Por su parte, Aldo Altamirano, Elio Ponciano y Paola Rovello escriben acerca de “Las voces de las infancias sobre la experiencia escolar”. Presentan los resultados de una investigación que tuvo como principal objetivo analizar las producciones de artes visuales de niños y niñas de nivel primario en torno a preguntas pedagógicas. El enfoque utilizado permitió reconocer a las infancias como sujetos activos, capaces de construir sentidos propios sobre los procesos de enseñanza y aprendizaje. Las producciones de los estudiantes reflejaron las complejidades del mundo infantil, donde la escuela no es solo un lugar de aprendizaje académico, sino también un espacio emocional y relacional.

Entre las Infancias que resisten a las lógicas dominantes están las que habitan en América Latina, en comunidades que valoran la vida buena, en armónica relación entre naturaleza y cultura. Así, aparece el vínculo entre infancias y Buen Vivir explorada por Lina Marcela Estrada Jaramillo y Juan Fernando García Castro en su texto “Infancias y Buen Vivir: Prácticas de cuidado y de resistencia en comunidades indígenas en Colombia”. Aquí se aborda la infancia en resonancia con el concepto andino de Buen Vivir. Se plantea ¿cuáles prácticas de cuidado y de resistencia están presentes en las infancias indígenas a partir del Buen Vivir? Para abordar esta pregunta toma un caso de niños perdidos en Colombia, su forma de supervivencia y el rescate. Esta experiencia posibilita pensar la vida de los niños, sus prácticas de resistencia al adultocentrismo hegemónico, las concepciones de las infancias hegemónicas y las circunstancias que posibilitan advertir que existen otras prácticas de subsistencia. Este texto busca distinguir narrativas del Buen Vivir en las infancias indígenas.

La relación entre la infancia y la Filosofía en el contexto de la práctica de la Filosofía con Niños/as es explorada en cuatro textos. El ensayo de Gustavo Ruggiero, “Un preguntar atento. ¿Qué busca la filosofía en la infancia?”, propone pensar filosóficamente la infancia, que no se reduce cronológicamente a los niños, como una fuerza del pensamiento movida por la capacidad de preguntar a partir de la interrelación de tres movimientos: mirar, escuchar y atender. Mientras se pregunta sobre la posibilidad institucional de acoger la novedad de la infancia, el autor la piensa como un mirar con el asombro de una primera vez, que interroga y a la vez abre la posibilidad poiética de la novedad en el mundo. Piensa en un escuchar de la lengua infantil, que confronta y disloca los sentidos preestablecidos. Ese mirar y escuchar demandan, nos dice, una atención dispuesta a distraerse para poder ver algo distinto y pensar algo nuevo.

Por su parte, Magda Costa Carvalho en el artículo “Por uma escuta inoperante: comunidades de infância nas fissuras entre vozes e palavras”, explora los sentidos otorgados a las voces infantiles en el contexto de la “comunidad de indagación” e invita a repensar la escucha desde la materialidad del sonido. Renunciando a criterios operativos provenientes de dispositivos pedagógicos que actúen como validadores, propone una escucha del misterio, del lado oculto del sentido que cargan las voces de los niños. Pensado a partir de las características acústicas de esas voces, expone la relevancia filosófica de la materialidad de un aparato fonador infantil.

En “La filosofía como experiencia de liberación en la escuela. Una propuesta desde la filosofía con niñxs”, Andrea Cristina Caccace Mini desarrolla una noción de filosofía como experiencia de liberación a partir de algunos filósofos latinoamericanos (Roig, Dussel, Scanone y Casalla). Profundiza en el concepto de experiencia de Gadamer y reflexiona sobre la filosofía con niñxs como alternativa latinoamericana a la filosofía para niñxs. Desarrolla las ideas de educación y de infancia que subyacen a la primera.

Finalmente, en “Prácticas Filosóficas: Emergencias a partir de la Filosofía con niños/as en la provincia de Mendoza, Argentina”, Andrea Suarez recupera la memoria de prácticas de filosofía en diversos contextos que exceden la actividad académica, a partir de entrevistas a la profesora Adriana María Arpini y a la maestra especialista Elizabeth Heidrich que, desde sus saberes y prácticas se constituyeron en importantes referentes para el afianzamiento de la Filosofía con Niños/as en esta provincia.


Referencias bibliográficas


Agamben, G. (2007). Destrucción de la experiencia y origen de la historia. 2° edición, Buenos Aires, Adriana Hidalgo.


Coordinadoras del Dossier:


-       Beatriz Fabiana Olarieta: Professora em Ciências da Educação pela Universidad Nacional de Cuyo (Mendoza, Argentina). Mestre e Doutora em Educação pela Universidade do Estado do Rio de Janeiro (Brasil), onde é Professora Adjunta do Departamento de Estudos da Infância da Faculdade de Educação.

E-mail: olarietaf@hotmail.com

 

-       Adriana María Arpini: Profesora, Licenciada y Doctora en Filosofía por la Universidad Nacional de Cuyo (Mendoza, Argentina), donde se desempeña como Profesora de grado y posgrado. Es Investigadora Principal de CONICET en las áreas temáticas de la Filosofía Práctica y la Historia de las Ideas Latinoamericanas. Coordina la Especialización en Filosofía con niños y jóvenes de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Cuyo UNCUYO.

E-mail: aarpini@mendoza-conicet.gob.ar 

 

-       Milena Quiroz: Profesora, Licenciada y Doctora en Ciencias de la Educación por la Universidad Nacional de Cuyo (Mendoza, Argentina), Magister en Educación por la Universidade Federal de Juiz de Fora (Brasil). Es docente universitaria y del nivel superior, integrante del grupo Filosofía Práctica e Historia de las Ideas Latinoamericanas, INCIHUSA, CONICET, Mendoza y del Centro de investigaciones interdisciplinarias de Filosofía en la Escuela de la FFyL, Universidad Nacional de Cuyo UNCUYO.

E-mail: mquiroz@mendoza-conicet.gob.ar